Je veux de l´amour, la joie, la bonne humeur...

Zaz - Je veux

Sehnsucht

¡¡Os escribo aún emocionada y excitada por el brillante espectáculo al que asistí anoche en el Teatro Real!!. Fui a ver la Netherlands Dans Theatre Company y salí del teatro extasiada. No quiero parecer cursi pero creo que es lo mejor que he visto nunca en danza contemporánea. Hace varios años creo haberles visto por primera vez en el teatro Albéniz (RIP) en el marco del festival de Otoño de la CAM, cuando tenía lugar en otoño y digo creo porque no recuerdo si vi a la NDT 1 o a la 2. En cualquier caso, no recuerdo salir tan impresionada… Quizá es que ahora estoy más sensible pero es  inevitable salir ¡enamorada y emocionada de la coreografía y de los bailarines!. La primera parte se llama Sehnsucht (Anhelo) y su puesta en escena es magistral gracias también el Concierto Nº4 de piano de Beethoven y su sinfonía No.5; la segunda parte se titula  Schmetterling (Mariposa) y en ella se combinan duetos y tríos que hablan de historias  de amor marcadas por la música que suena del grupo indie americano Magnetic Fields. 

En fin, solo puedo animaros vivamente a que os hagáis con entradas ¡YA! para hoy, mañana o el domingo, último día de su gira en España. Hay entradas por 12€ que tienen buena visibilidad y si queréis gastaros un poco más, perfecto. No os va a decepcionar, ¡os lo garantizo!. 

Besos danzarines

Minions

Ola de calor

Muy buenas…

Siento la ausencia de noticias y mi temporal abandono al blog pero no estaba muy ilusionada en actualizarlo así que decidí aparcarlo durante un tiempo… Lo importante es que estoy de vuelta y con ganas de haceros partícipe de planes, viajes, visitas y alegrías!.

Una reciente novedad con la que me he topado es el Bar o Cóctel bar Macera en la calle San Mateo 21.

Es un espacio rollo industrial, austero pero muy muy agradable. Lo mejor, su alcohol. ¿Por qué?. Porque lo hacen ellos mismos. Sí, elaboran su propia ginebra, vodka, güiski o lo que se te ocurra; que quieres un gin-tonic con sabor cítrico, te lo ofrecen; que lo prefieres dulce, perfecto también. Me gustó por sus techos infinitos, sus no-puertas de modo que la terraza está dentro y fuera y su mesa corrida del fondo para organizar eventos  del tipo que sean.

Tienen carta pero no degusté nada así que no os puedo comentar al respecto. El gin-tonic sí que os puedo contar que estaba delicioso y sin necesidad de convertirlo en un cocido montañés.

Besos calurosos