Hola de nuevo queridos amigos!
Os paso a comentar un sitio nuevo que he conocido gracias a mi amiga Gema y que me encantó. Se trata de Maricastaña, food and kitchen bar. Me gustó mucho su decoración aunque he de reconocer que es un estilo que empieza a repetirse con demasiada asiduidad en los nuevos garitos de Madrid. Puede ser que con el panorama actual, nos apetezca una vuelta a lo viejo conocido, a nuestras raíces, quién sabe... Lo que está claro es que ahora predomina un rollo romántico a la vez que vintage en estos nuevos locales, de paredes de ladrillo visto en muchos casos, con mobiliario decapado e incluso de jardín, con un aire rústico.
De hecho, ahora que me acuerdo, me atrevo a decir que Maricastaña podría ser la hermana pequeña del restaurante Filandón. Otro restaurante en la misma onda decorativa pero en versión XL en todos los sentidos: tamaño, carta, precios, público,…
La primera foto que os muestro es de Maricastaña y ésta de más abajo de Filandón (www.filandon.es).
Volviendo al primero, me gustó su cocina a pesar de llevar poco tiempo rodando y los precios son muy aceptables. Hay una planta inferior, agradable pero donde aún persiste cierto olor a bodega. Me gusta la enorme mesa alargada que puedes compartir con otros clientes y su enorme barra. Un sitio muy agradable para cenar después de ver algo interesante en el teatro Lara, que está justo enfrente!.
Y lo de conexión Berlín-Madrid viene por otro café que descubrí en Berlín, con cierto toque español, Oliv. Quizá sea un poco más sofisticado que Maricastaña pero también muy bonito y atractivo. Los clientes también comparten mesa de madera alargada y aunque no pude disfrutar de su carta por culpa de la hora, todo parecía muy healthy y sabroso. Su dirección es Münzstraße 8 (www.oliv-cafe.de).
Küsse!
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