La Chunga

El pasado martes  fui al Teatro Español a ver La Chunga, la obra dramática de Mario Vargas Llosa que dirige Juan Ollé y protagoniza Aitana Sánchez-Gijón. ¡Salí entusiasmada del teatro!.
Ella hace una interpretación brillante de La Chunga, la dueña de una taberna en Piura que frecuentan Los Inconquistables, una panda de pendencieros y tahúres; todo cambia cuando aparece en escena Mechita, la novia de uno de ellos y altera los sentimientos de toda la taberna, incluida La Chunga.

Fue tal la entrega de Aitana Sánchez-Gijón al personaje que durante los aplausos del público, su cara tenía una mueca de dolor tan profunda que parecía estar al borde de las lágrimas. Impresionante.

La obra de Vargas-Llosa me recordó a la historia y la atmósfera de “Conversación en la Catedral” aunque he de decir que mi título favorito del Premio Nobel es “La Fiesta del Chivo”. Volviendo al teatro, solo deciros que la hora y media se me pasó volando y que ha sido prorrogada hasta el 30 de Junio.

Besos no chungos

La Shica en el Café Berlín

http://www.youtube.com/watch?v=PP0cfb68VaE

Let´s go back to the cinema

Algunos de mis seguidores me reclaman que vuelva a hablar de cine así que haciéndoles caso, me pongo a ello. Os comento y os aconsejo sobre lo último que he visto en el cine y en mi casa.
Empezando por la pantalla de mi televisión, alquilé hace poco dos pelis que me gustaron mucho; de hecho más de lo que esperaba.

La primera de ellas es un film francés del año pasado titulado El nombre (Le Prénom). Está protagonizada por uno de mis actores franceses favoritos, Charles Berling y junto a él, Patrick Bruel, Valéri Benguigui, Guillaume de Tonquedec y Judith el Zein. He de confesar que me esperaba una comedia ligera sin mucha trascendencia y sin embargo, me encontré unos diálogos brillantes, ingeniosos, con cierta puesta en escena muy teatral que me atraparon y entusiasmaron. No os la perdáis.

Otra película que tenía ganas de hablar puesto que se trata de una gran, gran producción dirigida por un español con mucho talento, es Lo Imposible (The Impossible). Como muchos sabréis el film de Juan Antonio Bayona cuenta la experiencia sufrida por una familia española en el tsunami que arrasó las costas de Tailandia en diciembre de 2004. He de avisaros que lloré durante casi tooooodo el metraje porque las imágenes, las escenas están tan logradas que te encogen el alma; y por otro lado, el sufrimiento de esa familia es tan real que no puedes evitar las lágrimas. Naomi Watts se merece muchos premios y alabanzas por su interpretación… Qué bien lo hace.

Y por último, os hablo de la última "peli" visionada en mi adorado cine. Como parece que se acerca el cierre de "mis salas", los Renoir Cuatro Caminos, estoy intentando ir todas las semanas deseando ferviente e inocentemente que  mi pequeña aportación impida su cierre… Qué pena…

La película elegida fue La Caza (The Hunt), un film danés que ganó el premio al Mejor Actor en el Festival de Cannes de 2012. Su director es Thomas Vinterberg, uno de los integrantes del movimiento Dogma encabezado por Lars von Trier y del cual sólo conocía Celebración (Festen, 1998). En su día este filme me pareció brutal e impactante aunque con ciertas dosis de humor por lo que no sabía muy bien qué esperar de La Caza.  Pues bien, la interpretación de Mads Mikkelsen es espléndida y consigue transmitirnos su impotencia y angustia ante las injustas acusaciones que surgen sobre él en la pequeña comunidad en la que vive. He de confesar que una de las cosas que más me ha gustado de esta película es la atmósfera opresiva que tiene todo el metraje y que te atrapa. Sales del cine con cierta pesadumbre pero aún así, os animo a verla, YA.

Besos desde el cine

Pamplona

La semana pasada hice un viaje relámpago a Pamplona; fueron casi 24 horas pero intenté aprovechar el tiempo libre que me dejaron las obligaciones que debía cumplir.

No había visitado nunca esta ciudad y me gustó mucho aunque dudo que consiguiera adaptarme a vivir allí; no sabría explicar el por qué. Por otro lado, he vuelto enamorada de los pamploneses y las pamplonesas. Ha sido magnífica la interacción con todas las personas con las que he tenido ocasión de hablar. Qué amabilidad, qué ternura, qué trato más agradable, sencillo y abierto. Un gustico, como dirían ellos. 

Al igual que muchos turistas, hice el recorrido de los encierros de San Fermín; comencé bajo la hornacina de San Fermín, exactamente en la calle donde los corredores cantan a su patrón, rogándole protección minutos antes de que se lance el cohete que avisa de la salida de los morlacos. Paseé por la calle Estafeta y la famosa curva de Mercaderes hasta el final del recorrido en la plaza de toros. Intenté imaginarme aquellas callejuelas repletas de mozos y con la tensión que se debe masticar en el ambiente.  

Poco después disfruté de la belleza de la plaza del Castillo desde el café Iruña y justo al lado de El Rincón de Hemingway. Dos sitios llenos de sabor y autenticidad.

Me encantó el estilo Art Nouveau de los balcones del Nuevo Casino Eslava y disfruté de los pintxos del bar Txoko, uuuummmmm, ¡¡qué placer culinario!!!. Como era de esperar, la gastronomía de esta tierra es una de sus mejores señas de identidad.
Besos riau riau

Délicieuse!!